Durante los últimos años, la transformación digital ha evolucionado a gran velocidad, pero no ha venido sola, sino que ha acelerado peligrosamente las ciberamenazas, cada vez más sofisticadas.
Paralelamente, las amenazas digitales han crecido en número, en complejidad y en impacto. En este contexto, 2025 se está consolidando como un año crítico en materia de ciberseguridad.
Un panorama alarmante: más ciberataques, más sofisticados
Los informes de los principales organismos de ciberseguridad, como ENISA y el INCIBE, muestran un aumento del 68% en los ataques de ransomware durante los primeros meses del año. Además, han crecido exponencialmente los ataques dirigidos mediante phishing, ingeniería social, vulnerabilidades en software no actualizado y accesos remotos sin protección adecuada.
La novedad más preocupante es que los atacantes ya no solo van a por grandes corporaciones. Cada vez más, las pymes se convierten en el blanco preferido, precisamente porque suelen contar con menos medios para protegerse y, sin embargo, gestionan datos sensibles y operaciones críticas para su actividad.
¿Qué está en juego con las ciberamenazas?
Un ataque puede tener consecuencias devastadoras:
- Pérdida de información clave: contratos, historiales de clientes, facturas, documentación legal.
- Parálisis total de la actividad, con interrupciones que pueden durar días o semanas.
- Pérdida de confianza de los clientes y daño reputacional.
- Posibles sanciones por incumplimiento de normativas como el RGPD.
Muchas empresas creen estar protegidas simplemente por contar con un antivirus o un firewall. Pero estas herramientas, aunque necesarias, no son infalibles, y ninguna de ellas garantiza la disponibilidad de la información en caso de incidente.
El backup: el plan de recuperación que toda empresa necesita
En este escenario, el backup se presenta como una de las medidas más efectivas, económicas y sencillas para garantizar la continuidad de un negocio. Disponer de una copia íntegra y actualizada de toda la información crítica puede ser la diferencia entre una recuperación exitosa y el cierre definitivo de la empresa.
Pero no todos los backups son iguales. Si nos preguntamos cómo protegerse de las consecuencias de un ciberataque, la respuesta está en la copia de seguridad externa, y además con las siguientes características.
¿Qué características debe tener un backup realmente eficaz?
- Automatización total
La ejecución manual de copias de seguridad es un riesgo. La automatización asegura que no haya olvidos ni retrasos. - Versionado y retención
Poder acceder a diferentes versiones de un mismo archivo es esencial para evitar que una copia infectada sobrescriba las sanas. - Cifrado de datos
La seguridad no solo aplica a la infraestructura: también es vital cifrar los datos tanto en tránsito como en reposo. - Pruebas de restauración periódicas
De poco sirve tener backups si no se puede restaurar la información cuando más se necesita. Las pruebas regulares son clave. - Almacenamiento externo (off-site)
Este punto es crítico. Tener las copias en el mismo entorno físico que los datos originales expone a la empresa a riesgos como incendios, robos, inundaciones o ataques de ransomware que cifran toda la red local, incluyendo los dispositivos de backup.
Por qué es imprescindible que el backup esté fuera de la oficina
Un error común en muchas empresas es confiar únicamente en soluciones de copia local, como un servidor, un disco duro externo o un NAS (almacenamiento en red). Estas soluciones no protegen ante incidentes físicos o ataques generalizados que afecten a todo el entorno de trabajo.
Por eso, las estrategias más seguras incluyen:
- Backups en la nube: servicios que permiten almacenar datos en centros de datos seguros, con conexión cifrada y acceso controlado.
- Soluciones híbridas: una copia local para restauraciones rápidas y otra remota para contingencias mayores.
- Replicación geográfica: ideal para organizaciones con múltiples sedes, replicando la información entre distintas ubicaciones.
Este enfoque garantiza que, incluso en caso de desastre total, los datos sigan estando a salvo y disponibles para su recuperación inmediata.

Cómo protegerse de un ciberataque: protección legal
Además de las razones operativas, existe un fuerte componente legal. Según el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD), las empresas deben implementar medidas técnicas y organizativas adecuadas para proteger los datos personales.
No disponer de un sistema de backup robusto podría considerarse una negligencia, con consecuencias legales y económicas importantes.
El backup es una necesidad crítica para protegerte de un ciberataque
Los ciberataques ya no son una posibilidad remota: son una realidad cotidiana. Las empresas no pueden permitirse seguir sin una estrategia clara de respaldo y recuperación. Todo negocio debe preguntarse cómo protegerse de un ciberataque y sobretodo de sus consecuencias.
Invertir en un sistema de backups externo, seguro, automatizado y probado es invertir en la supervivencia del negocio. La pregunta que toda organización debería hacerse no es “¿Qué pasa si nos atacan?”, sino “¿Estamos preparados para recuperarnos cuando ocurra?”.